miércoles, 19 de abril de 2017

Concepto Política Criminal.

“Aquel conjunto de medidas y criterios de carácter jurídico, social, educativo, económico y de índole similar, establecidos por los poderes públicos para prevenir y reaccionar frente al fenómeno criminal, con el fin de mantener bajo límites tolerables los índices de criminalidad en una determinada sociedad.” (Borja, 2011, p. 20). Es importante hacer mención de la definición propiamente siendo disciplina, el cual el autor nos dice lo siguiente “aquel sector del conocimiento que tiene como objeto el estudio del conjunto de medidas, criterios y argumentos que emplean los poderes públicos para prevenir y reaccionar frente al fenómeno criminal.” (Borja, 2011, p. 21)
Bibliografía. Borja, Jiménez, E. (2011). Curso de Política de Criminal. [Página web]. Recuperado de <http://campusvirtual.uned.ac.cr/lms/pluginfile.php/89615/mod_resource/content/1/Lectura%20Pol%C3%ADtica%20criminal.pdf>

Tipos de Políticas Criminales: Preventivas.

Son las medidas orientadas para que el ciudadano no incurra en la delincuencia, estas medidas pueden ser de carácter económico, educativo, social o incluso cultural, para ciertos sectores de la criminalidad (violencia doméstica o criminalidad racista y xenófoba, por ejemplo) pueden ser tan relevantes y eficaces como el mismo sistema legal.

Tipos de Políticas Criminales: Represivas.

Son las sanciones que les corresponde establecer y ejecutar al gobierno en lo que se llama derecho de ejecución penal. Por otro lado el derecho Penal ocupa un lugar preeminente porque constituye la base de la definición de aquello que se considera delito frente a la conducta lícita.

Origen del termino.

Muchas personas profesionales en este ámbito no tienen un acuerdo unánime en relación a quien y donde se originó por primera vez el término política criminal. Varios de estos conocedores dicen que Feuerbach es quien dio el génesis del término, ya que este en 1801 expreso que la kriminalpolitik, a su entender era la sabiduría legisladora del estado. Iniciando de esta manera un estudio científico de políticas estatales para disminuir la criminalidad.
Otra parte de conocedores definen a Von Liszt quien en su famoso Programa de Marburgo (1888) dijo lo siguiente “apelemos a una ciencia nueva que puede ser llamada Política Criminal, la cual investigue de un modo científico las causas de los delitos (aprovechando los ricos materiales y los excelentes medios de conocer que proporcionan hoy la Antropología y la Estadística), observe los efectos de la pena (para comprobar si esta consigue realizar de hecho sus fines) y emprenda una lucha activa contra el crimen, valiéndose de armas adecuadas al objeto perseguido; armas que pueden consistir, tanto en las penas útiles, como en otros medios afines con ellas (las medidas de seguridad)”. (López y Arrojo, 1985).
Y por último una menor parte de autores como Langle y Saldaña, opinan que quien utilizó por primera vez el término de Política Criminal fue Kleinsrod, quien en el Prólogo de la Adiciones al Tratado de Von Lizt (1793) quien dispuso en ese libro el termino Política del Derecho Criminal (Polítik des Criminalrechts), como se definió inicialmente y que posteriormente evoluciono y llego a ser la Kriminalpolitik.
El autor ya mencionado Langle sugiere que existe una larga serie de antecedentes que respaldan la existencia de términos que de alguna forma tienen similitudes con la concepción moderna de la política Criminal, como por ejemplo el autor Tomas de Aquino en su libro “Summa contra los gentiles”, aboga por principios sobre el fin y el papel de la represión en el combate a la criminalidad. También menciona que autores germanos de mitad del siglo XVI y XVII, atestiguan la existencia de una ciencia que tiene por objeto la crítica al derecho vigente y cómo éste debe ser reformado, llamándola gesetgebungkunde (ciencia de la legislación). Además menciona a Cesar Beccaria en su tratado de los delitos y las penas, otorgo un sentido racional al derecho penal, convirtiéndose con ello en el crítico más audaz de la legislación penal y en propuestas para su reforma, elementos que forman parte de la Política Criminal.
Por último se mencionan a los autores Filangieri que habla de la “sciencia della legislazione” (ciencia de la legislación) y a Ferri que ya conocía los anteriores y hablo sobre el arte de formular prácticamente en las leyes las reglas abstractas de la teoría criminal.

En conclusión no se puede atribuir el término y el génesis de la doctrina Política Criminal más que a Von Liszt, ya que este autor comienza el estudio científico del conjunto sistemático de principios garantizados por la investigación científica de las causas del delito y de la eficacia de la pena, según los cuales dirige el Estado la lucha contra el crimen por medio de la pena y de sus formas de ejecución, que como resultado sería la Política Criminal.

Bibliografía: López, R y Arrojo, M (1985). Compendio de Criminología y Política Criminal. España: Editorial Tecnos.

Principios de la Política Criminal.

El primero de ellos es de la dignidad humana que es el reconocimiento del hombre como centro y finalidad de toda actividad estatal y la aceptación de la primacía de aquel en virtud de dicha condición. El segundo se basa en el principio de la regulación jurídica, que está ampliamente reconocido por la constitución y las leyes secundarias. El tercer principio se trata de la legalidad Político-Criminal, que se define como aquel limite al poder estatal del estado en cuya virtud no se puede interpretar que un acto cualquiera es delictivo y por tanto penalmente sancionable.

Por otro lado encontramos el principio de mínima intervención, que según dice que la intervención penal debe ser la última forma de solucionar o combatir una conducta lesiva a un bien protegido por la ley. El principio de eficacia, que se basa en la correcta y efectivo uso de los recursos, en lo que a inversión de estos se refiere. Ya que la política criminal debe planificar una estrategia para ese rubro, esto para maximizar los resultados, a menor costo, sin que ello repercuta en la eficacia de la misma.



El principio de la transparencia, supone que los actos del gobierno y sus decisiones pertenecen a la ciudadanía, por lo tanto, sus contenidos, fines, resultados y actores están sujetos al escrutinio del público.
El principio de participación ciudadana, supone por su parte que el combate a la criminalidad, necesitad la ayuda de la ciudadanía, que en todo sentido no puede ser disminuido a la mínima expresión  tolerable.
Por último el principio de coordinación interinstitucional, este dispone que todas las instituciones del Estado han sido creadas para objetivos diferentes, con roles específicos para cada uno, en la lucha contra la criminalidad, a través de las decisiones que este tome, deberán coordinarse entre sí y prestarse auxilio según la función de cada institución.

Políticas Criminales en el sector económico.

En lo que respecta al sector económico, podemos hacer relación a los recursos que emplea el gobierno a temas de seguridad, esto incluye a las medidas preventivas y represivas; se refiere a que los ministerios de seguridad emplean estos recursos según sus necesidades. Las cuales pueden ser el contrato de personas para que se desempeñen como agentes de seguridad, así como la compra de vehículos y motocicletas para dar una mayor y rápida cobertura. También puede tratarse de que los órganos competentes inviertan en tecnología.
Debemos mencionar que este sector económico hace relación con la inversión en los temas de prevención, como lo son la sección de programas preventivos del Ministerio de Seguridad Pública de Costa Rica. Estos están dirigidos a escuelas, colegios, comercios y a comunidades en general; en resumen tratan de capacitar a la sociedad juvenil y adulta para que adopten conductas sociales que ayuden a prevenir la criminalidad y la delincuencia.
En otro ámbito de las políticas criminales del sector económico, podemos mencionar que el Estado de gobierno democrático, crea opciones labores para el sector social que se encuentra en vulnerabilidad. Esto con el propósito de que las personas no incurran en la práctica de cometer actos delictivos por la necesidad. Esto se ve reflejado con resultados positivos a mediano y largo plazo, dependiendo de los programas laborales que ofrezcan el Gobierno y sus órganos encargados.

Políticas Criminales en el sector político.

En el ámbito político podemos hacer referencia a las creaciones de políticas acordes a cada problema social y fenómeno criminal, especialmente las que son respetuosas de los derechos humanos y de la institucionalidad democrática.
Otra de las políticas creadas en diferentes países son las democráticas y respetuosas de la diversidad cultural. Que no invaden los derechos y garantías de las personas.

Políticas Criminales en el ámbito social.


En el aspecto social podemos decir que las políticas criminales adoptan el rol de sugerir, corregir, y dar ideas de nuevas medidas para un mayor bienestar de la sociedad. Como por ejemplo, gracias a las políticas criminales en muchos países, incluido Costa Rica, se concretan construcciones de hogares de cuido infantil en comunidades donde se presentan algún índice de criminalidad. En estos lugares se ofrecen los servicios de cuido, alimentación y lo más importante educación para todos los niños pertenecientes a estos centros.
Por otro lado, se puede mencionar que la recreación es un punto importante en el ámbito social, en Costa Rica por ejemplo de han construido centros de esparcimiento como ejemplo los polideportivos donde la población de menor ingreso puede hacer uso de las distintas instalaciones a un bajo costo, lo que permite que las personas aprendan y descubran si tienen vocación o el talento para llegar a desempeñarse profesionalmente.

En Costa Rica específicamente se practica (considero yo) un óptico respeto de los derechos de los humanos, así como una seguridad ciudadana que se preocupa por mantener en orden y tranquilidad a toda la población.

¿De qué se compone una política criminal? ¿Quién valora y aprueba las políticas Criminales?

La respuesta a mi criterio es que las políticas criminales se componen de la unión del derecho penal con la criminología, gracias a estas, los resultados son la conformación de políticas eficientes; por su parte el derecho penal brinda el conocimiento legal y político. La criminología en cambio realiza las investigaciones, análisis y estudios de campo, es decir que tiene contacto directo con las causas que están afectando a la sociedad, esto con el fin de crear en conjunto al derecho penal, las medidas necesarias para reducir los índices de violencia y delincuencia.
La valoración y aprobación de las políticas considero que les corresponde a los magistrados, quienes realizan un criterio de lo que se está presentando como una posible nueva política. Ellos se encargan como  todo proyecto de ley, de aprobar y sugerir modificaciones para que se realice de acuerdo a los mandatos de la Constitución Política. 

¿Pero han servido dichas políticas criminales?

En mi opinión considero que en Costa Rica si han servido, esto en el ámbito económico, ya que se ha demostrado el poder eficiente administrativo que posee el ministerio. Con la compra de flotillas de patrullas y motocicletas de alta calidad, también la compra de equipo tecnológico, lo que permite un trabajo eficiente contra el narcotráfico, y actos delictivos que se dan seguido en la población. Otro aspecto es la contratación de más policías, esto permite llevar seguridad a más comunidades y por ende la sociedad siente de alguna forma más tranquilidad.

En el aspecto político, podemos hacer referencia a lo penitenciario ya que en el país en los últimos meses se ha optado por diferentes medidas de libertad condicional para reos que cumplan con un cierto perfil, con la justificación de que esto servirá para bajar los índices de hacinamiento. Se vale mencionar que estas medidas no han tenido aceptación en la sociedad en general, y peor aún es que los resultados son negativos, ya que varios reos han sido nuevamente arrestados por cometer delitos, desde robos a comercios hasta asaltos a mano armada a personas en las calles.

¿Pero a quien van dirigidas las políticas criminales?

Muchos podemos pensar que estas políticas van dirigidas exclusivamente para las personas que se encargan de cometer actos de violencia y delincuencia. A través de todo lo estudiado he podido darme cuenta que muchas políticas criminales y en específico las preventivas están dirigidas a la población que se encuentra en una condición de vulnerabilidad social. No se puede dejar de lado a la sociedad común, que en muchas ocasiones estas políticas se encargan de velar por el respeto de los derechos que cada uno de tenemos según nuestra constitución.
Otras políticas van dirigidas a órganos encargados de velar por la seguridad, y donde se les presenta en lo que deben corregir para que ejerzan sus funciones de una más eficiente.
Además existen, las políticas públicas dirigidas hacia la delincuencia juvenil. Deben crearse políticas claras de prevención de la violencia, con el objetivo de evitar la incorporación de más niños y jóvenes a las organizaciones criminales, lo más importante es hablar directamente a la población juvenil sobre los riesgos que implica pertenecer a las mismas.

¿Como se fortalece la Política Criminal?

Sin duda alguna el aumento de la criminalidad y la delincuencia son causas directas para que los distintos procesos de la Política criminal se vean fortalecidos, ya que esta se presenta y existe prácticamente en todas las sociedades del mundo, tanto las más primitivas como las desarrolladas. Un ejemplo de esto es que las medidas llamadas preventivas se subdividen en primarias, secundarias y terciarias, según lo que se quiera erradicar o evitar.
“La prevención primaria se concentra en las causas de la criminalidad, a resolver el conflicto que subyace en el crimen, para neutralizarlo antes de que se manifieste.
La prevención secundaria actúa después, no en los orígenes del delito, sino cuando el conflicto criminal se produce o se genera, cuando se manifiesta. Opera a corto y mediano plazo y se orienta selectivamente a determinados sectores de la sociedad, aquellos grupos y subgrupos que exhiben mayor riesgo de protagonizar el problema criminal. Los operadores sociales de esta prevención son jueces, fiscales y policías. Aquí el que prima es el modelo punitivo; es decir, el del control en las calles y la prevención policial.
La prevención terciaria se refiere directamente a la población reclusa o interna y su fin es evitar la reincidencia. En este caso, conecta con el fin de prevención especial positiva de la pena, concretamente en sus fines resocializadores, por lo que puede plantearse para ella también los mismos cuestionamientos hechos anteriormente. Esto es, actúa ya cuando el delito se ha cometido y no detiene las causas de la delincuencia, por lo que sus efectos son bastantes limitados. Considero que en este ámbito se debe incidir, sobre todo, en la asistencia post-penitenciaria, es decir coadyuvar con una serie de medidas económicas y sociales para ayudar al ex recluso a reintegrarse en la sociedad, que es lo que está asumiendo el nuevo modelo penitenciario.” (Moscoso, 2016, p. 1)
Por su parte las medidas represivas se han visto fortalecidas en el tipo de penas impuestas por el estado social y democrático de derecho. El ejemplo más claro es el caso de la pena de muerte en los Estados Unidos. Esto al parecer en la sociedad Norteamérica causa un efecto simbólico de mayor seguridad. Sin embargo, cabe aclarar que esta medida no ha significado un descenso de las tasas de criminalidad.

Vale rescatar que la política criminal se ha visto fortalecida gracias a la participación de la ciudadanía, en lo que respecta el compromiso de disminuir a la menor expresión tolerable el crimen y la delincuencia. Según lo anterior lo han informado los órganos judiciales e instituciones encargadas de la seguridad pública en diferentes medios de prensa.

Bibliografía: Moscoso Segarra, A. (2016). Listín Diario. Debilidades y Fortalezas de la política anticrimen de los Estados. [Página web]. Recuperado de <http://www.listindiario.com/la-republica/2009/10/07/117305/debilidades-y-fortalezas-de-la-politica-anticrimen-de-los-estados>

Reacción Social ante una Política Criminal.

Debemos recordar que la política criminal, en términos generales se trata del estudio de las medidas utilizadas por los órganos de gobierno para abatir los índices de violencia y de delincuencia en una sociedad.
Las medidas utilizadas serán de dos tipos, preventivas y represivas. La primera con medidas orientadas para que el ciudadano no incurra en la delincuencia, y la segunda se refiere a las sanciones que le corresponde establecer y ejecutar al gobierno en lo que se llama derecho de ejecución penal.
Puedo entonces concluir que la reacción social ante una política criminal va a depender de que tipos de medidas se tomen, ya sean preventivas o represivas.
Dentro de las preventivas las reacciones pueden ser varias, esto debido a las medidas que tomen los órganos competentes. Ya sea que se construyan campos polideportivos, bibliotecas, escuelas, guarderías; donde las reacciones van hacer de convivencia, practica de valores, recreación, deportes, educación, trabajo y lo más importante practica de buenas conductas. Donde el bienestar social va hacer mayor y por ende las acciones de violencia y delincuencia serán mínimas.

Beneficios de una Política Criminal bien planteada y dirigida.

Se obtendrán benéficos de buenas prácticas sociales, según las medidas preventivas y represivas que tomen los órganos competentes.
Recordemos que la política criminal toma los aportes del derecho penal y de la criminología, para determinar que se está haciendo bien y que hay que corregir, para luego determinar las medidas para combatir el problema.
Podemos mencionar dentro de los beneficios, el respeto de todos los derechos ciudadanos, lo que quiere decir que las personas pueden practicar un trabajo, recibir una educación adecuada, tener espacios de recreación y esparcimiento con la tranquilidad de que no se le serán violadas las libertades que la política criminal establece como derechos y principios.
Otro de los beneficios que puedo mencionar es el respeto a los bienes jurídicos, los cuales son: la vida, la integridad corporal, la seguridad y la libertad sexual, los derechos de la familia, los derechos de la sociedad, entre otros más.

Control social.

El objetivo del control social es lograr que los miembros que integran la sociedad amolden su conducta según los lineamientos del grupo social. 

Medios de Control Social informales.

*La familia

*La escuela


*La religión

*Organizaciones de masas

*Los grupos informales y la sociedad


Medios de Control Social formales.

*Control social persuasivo

*Control social coactivo

Relación entre las Políticas Criminales – Derecho Penal – Criminología

La Política Criminal se abastece de las investigaciones de la criminología y de los estudios del Derecho Penal para ordenar un programa tendente a evitar la proliferación delictiva. La Criminología se encarga de estudiar y determinar cómo y por qué ocurren los hechos violentos y delictivos, así como a que obedecen estos hechos ilícitos. Por su parte el Derecho Penal tiene por objeto establecer las conductas prohibidas u ordenadas por la sociedad a través de la legislación y luego a través de la ley para conservar el orden social.

Políticas Criminales fallidas.

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Políticas Criminales hacen cerrar cárceles.


Noticia Positiva.